Al ver películas, uno debe ser consciente de que, a pesar de ser selectivo con lo que se quiere ver, nunca se estará 100% conforme con lo que ha visto, y siempre nos contraremos con productos excelentes, buenos, malos y otros de los que uno espera algo pero obtiene algo muy inferior a lo que le vendieron, pude haber hecho una lista con las peores películas que vi en el año, pero siendo que evité ver muchas de las que se catalogaron como tal, he decidido hacer lo propio con las cintas que me parecieron decepcionantes, con esto no quiero decir que sean malas, o que no me gustaron, que si bien sucedió en algunos casos, la constante aquí es que obtuve menos de lo que esperaba, así que aquí está la lista con esas 10 películas:
10. El Ornitólogo (O Ornitólogo/The Ornithologist, 2016)
Dir. João Pedro Rodrigues.
¿Cómo puede una película de la que no sabías nada, de la que no tenías ninguna expectativa, y de la que solo te basaste en algunas recomendaciones, ser tan decepcionante? Ni siquiera yo tengo una respuesta clara, nunca he visto nada de ese director como para tener un comparativo, pero, lo que la película empezó mostrándome, ya ni siquiera terminó siendo, y creo que es ahí en donde encuentro lo decepcionante. La trama es una cosa sencilla que se quiere hacer la complicada, es un ornitólogo que, al estudiar las aves de río, se pierde y tiene que caminar guiandose por el mismo río por el que vino para regresar a su camioneta y así volver sano y salvo a casa, sin embargo en el camino se va topando con personas cada vez más extrañas y con elementos de erotismo que convierten ese viaje de regreso a casa, en un viaje de autodescubrimiento.
Lo sé, suena a una película promedio de arte más, y si, lo es, lo que pudo ser un poderoso “stand alone drama”, se complica para hacerse ver el interesante, y resulta en una película aburrida en la que, el tiempo que vemos al protagonista solo en pantalla es el menos interesante pero el que más metraje abarca, que lo único que tiene de atractivo es ver la interacción que tiene con los otros personajes con los que se va topando, pero que no todos son interesantes, se trata de apelar al erotismo en demasiadas ocasiones pero rara vez se logra algo estéticamente sustancial. Lo peor de todo es su tercer acto todo Jodorowskiano que, retomando elementos de las cintas y filosofía de aquel charlatán, convierte ese viaje de autodescubrimiento en lo más gráficamente idiota que se pudo proponer, en definitiva una película nada recomendable.
9. Alien: Covenant (2017)
Dir. Ridley Scott.
Hay tres cosas por las que esperaba esta cinta, unas con mayor peso que otras pero todas ellas a considerar, la primera es que sería una secuela de “Prometheus” que no contaría con quienes hicieron el peor trabajo en aquella, es decir, Noomi Rapace como protagonista y David Lindelof y Jon Spaihts como guionistas, por lo que podía ser un producto que superara en calidad a su antecesora, en segundo lugar, esta secuela estaría mas relacionada con la saga original de Alien, y por fin veríamos xenomorfos en acción, como tercera razón está el hecho de que, los que hicieron el mejor trabajo en la anterior película, Scott como director, y Fassbender ahora como protagónico, regresarían. Entonces, ¿Qué podría salir mal? Pues… todo lo demás.
Es una película que se centra tanto en el par de personajes que hace Fassbender, que no le interesa desarrollar para nada al resto de los tripulantes de la nave, tanto así que, escenas de los trailers en las que aparecen, fueron eliminadas a diestra y siniestra, y sinceramente, ni las extrañamos, es una estupidez tras otra la que comenten sus protagonistas que no convierten en una tarea difícil el que solo nos enfoquemos en los androides gemelos, resulta bastante agradable ver que el origen de los xenomorfos como los conocemos de toda la vida sea tan retorcido, que resulta un buen guiño al tono de la primera película de la saga, pero parece que los momentos en los que la misma alcanzó una calidad sobresaliente, han quedado en el olvido, o parece que no se repetirán jamás, aún así puedo decir que la disfruté, el diseño de arte y de personajes me fascinó, y estoy mas que puesto para ver la siguiente entrega, aunque creo que ahora si tendré en mente no generarme ninguna expectativa.
8. Voraz (Grave/Raw, 2016)
Dir. Julia Ducournau.
El cine de terror de festivales se ha convertido en un producto que, mientras más notas sensacionalistas arroje, mayor será el mérito de sí mismo, como un upsocl de vómito y gente desmayada, infartos y devoluciones de boletos. En esta ocasión, la historia de una chica estudiante de veterinaria que de ser vegana se convierte en caníbal al probar por primera vez la carne. La cinta prometía bastante, no solo por la trama sino por las escenas gráficas que provocaron, como ya mencioné antes, desmayos en cines y mucha controversia alrededor del mundo.
No sé si el publico latinoamericano es poco impresionable pero la verdad no vi en ningún momento algo que me hiciera apartar la vista de la pantalla, si, es muy gráfica con las escenas que muestra, pero nada que no haya visto antes, en sí puedo decir que la película no es mala, de hecho es la que mas me gusta de las que conforman esta lista, pero aún así no me pareció para tanto porque, por si fuera poco, tuvo muy buenas críticas en todas partes, si bien tiene varios aciertos, por ejemplo las actuaciones de las hermanas protagonistas, el hecho de que sea casi un remake de “Ginger Snaps” no le ayuda mucho, sin embargo su directora y protagonistas prometen mucho a futuro, no habrá que perderles la pista.
7. Fragmentado (Split, 2016)
Dir. M. Night Shyamalan.
Jamás una película de este director me había dado tanta hueva como su nueva entrega, claro, no he visto todas sus películas, pero hasta “Lady In The Water” me la eché en una sentada. Con esta cinta sobre un asesino con puticientas mil personalidades tuve que pausar la película varias veces, los personajes no podrían importarme menos, y cada vez me valían más madre, sobre todo las chicas secuestradas, casi le gritaba a la pantalla que ya por favor las matara para que dejaran de decir tantas idioteces, la cinta tuvo muchas trampas, eso sí, para que nos saliera con el final inesperado que siempre tiene preparado Shyamalan, la trampa mas babosa (y más baboso yo por creerla) es que las muchachas secuestradas nunca voltean a ver a la otra chica que está con ellas, la rarita que casi no habla, esto para hacernos creer que ella es otra personalidad del asesino y pues, SPOILER SPOILER, no lo es.
Si hay algo rescatable de esa tontería es la actuación de James McAvoy, no le daba ni el Ariel a mejor actor, pero por lo menos interpreta todas estas personalidades de forma convincente y nada ridícula, en lo demás, tiene una edición de hueva, un guión de mucha más hueva, pero sobre todo, se crea toda una mitología, por llamarlo de alguna manera, para justificar cuanta mamada se le ocurrió para el trastorno de personalidad disociativa que si nos venía con que existen personalidades con superpoderes, ahí va de pendejo a mostrarnos una personalidad super fuerte que…...wait, SI PERRAS PASÓ!!!!, ya me detendré de hablar de esta pendejada.
6. The square: La Farsa Del Arte (The Square, 2017)
Dir. Ruben Östlund.
Al ganar la palma de oro en Cannes, esta cinta se volvió en un must watch, afortunadamente no estuvo tan lejos su estreno en cines y se pudo apreciar el año pasado, una lástima que la espera no haya valido la pena, es una cinta larguísima que basa todo su relato en momentos hilarantes por los que pasa el protagonista, sin una estructura clara y sin poder definir bien si lo que quiere mostrar en un desarrollo de punto A a punto B, o solo fueron filmando lo que se les iba ocurriendo sobre la marcha. No es del todo una mala película, tiene buenas actuaciones y la fotografía es soberbia. La trama gira en torno a un curador de una galería de arte prestigiosa, en una época en la que el arte posmoderno se ha convertido más en el discurso del vendedor que en el discurso de la corriente misma.
Es así como la mayor ironía proviene de la misma película, la cual es justamente lo que critica, es más un discurso, es más lo que otra persona puede platicarte de ella misma, que lo que te sientas a ver en una sala mientras tragas o bebes lo que sea que hayas comprado en la dulcería, y no se preocupen amiguitos intelectuales, se que precisamente esa es la intención, pero no por ello la acepto, es una cinta con muchísimas escenas de sobra, que bien pudo haber durado media hora o 45 minutos menos, pero que, como ya lo mencioné antes, pareciera que dejaron andar sola y ya no tuvieron idea de como terminarla. La cinta anterior de este director, “Force Majeure”, trata esta misma cotidianeidad de una manera mucho más amena, divertida y directo al grano, por lo que la decepción fue aún mayor.
5. Barreras (Fences, 2016)
Dir. Denzel Washington.
Como cada año dentro de lo más decepcionante, a huevo tiene que aparecer una película que haya sido nominada al Oscar, porque esos premios, queramos o no, nos hacen fijarnos en películas en las que de alguna otra manera no veríamos aunque nos las encontremos en la tele en un día de desquehacer sin internet cerca. En esta ocasión es la adaptación de la obra de teatro homónima, que tiene como principal atractivo el ser protagonizada por los dos actores que la interpretaron en los escenarios, Denzel Washington y Viola Davis, quienes interpretan a una pareja de clase baja que, en su pequeño mundo de cotidianeidades, se tienen que enfrentar a los sueños y fracasos que ellos como matrimonio enfrentan y a los que sus hijos han construido.
La trama es muy atrayente, el problema está en querer adaptar la cinta tal cual como se vió en teatro, no existe una propuesta real, no hay nada que se haya modificado para el lenguaje cinematográfico, vamos, al Oscar incluso nominaron al escritor de la obra original, quien lleva años muerto porque, tal cual la escribió, se puso una cámara enfrente y comenzaron a filmar. Las actuaciones de los dos protagonistas son buenas, pero no encuentro material para el reconocimiento que llegaron a tener, en especial para Davis, quien, a excepción de una escena bastante lucidora, el resto de la cinta tiene un registro muy bajo, los otros actores a sabiendas de que serían opacados, no hacen su mayor esfuerzo para entregar algo destacable. Pareciera que la dirección de la cinta refleja muy bien la carrera actoral de Denzel Washington, quien es capaz de entregar unas de las mejores actuaciones de la historia y a la vez, puede llegar a ser cegado por su propio ego, dormirse en sus laureles, y hacer el mínimo esfuerzo posible.
4. XX: Pasión Por El Horror (XX, 2017)
Dir. Roxanne Benjamin, Karyn Kusama, Annie Clark & Jovana Vuckovic.
Dentro de las modas mas pedorras del cine de terror actual, debo decir que la que siempre termina llamando mi atención como la luz a los mosquitos, es la de las películas antológicas, ya que pareciera que quien orquesta dichas cintas, solo pone dinero en la mesa y les dice a los directores “tienes toda la libertad creativa que jamás has tenido, ve y vuela libre, haz tu corto y nos vemos aquí dentro de un mes para editarlo y ponerlo junto al de los otros” y eso es tan atractivo, porque podría pasar una de dos cosas, o sale una chingonería que nadie vio venir, como en algunos de los cortos de V/H/S o México Bárbaro, o sale una reverenda mamada que solo al cast y crew del corto le gustaría volver a ver...como en algunos de los cortos de V/H/S o México Bárbaro.
Para esta cinta se contaría solo con directoras mujeres, todas familiarizadas con el género, aunque con no muchos trabajos en su haber (es incluso el primer trabajo tras la cámara de Annie Clark). La película viéndose como un todo, es malísima, aburrida a pesar de que dura muy poco, cada corto es como un chiste alargado para seguir haciéndote reír pero que cada vez provoca menos risas en ti, si acaso el corto que se salva es el de “The box” con un buen manejo del suspenso y llevando su historia a límites que no son tan descabellados, aún así tampoco es como para decir que es un trabajo excelente. Solo espero que no se les ocurra la genial idea de hacer una segunda parte…porque ahí estaré, viéndola.
3. La Vigilante Del Futuro: Ghost In The Shell (Ghost In The Shell, 2017)
Dir. Rupert Sanders.
Vamos por partes con esta película, es un proyecto que nació muerto, desde el inicio el poner a Scarlett Johansson en el protagónico hizo que los otakus del mundo, ávidos de ver senos enormes en el cine, dijeran que hubo un white washing y quejándose por ello, dichas quejas, tan de moda entre lo políticamente correcto de aquel entonces, no hicieron nada para detener la filmación (como sí lo hizo, meses después, la renuncia de Joel Kinnaman como villano del reboot de Hellboy). Yo no tengo absoluto problema con que se valgan de actores, independientemente de su nacionalidad, para interpretar tal o cual personaje, de hecho en la cinta lo justifican lo mejor que pudieron (tomando en cuenta las muchas limitaciones en todo aspecto de su guión).
En sí de la película lo que mas esperaba era ver todo el aspecto visual que se cargaría, y cómo iba a tratar de ser innovador para lo que el anime original proponía y que hoy en día, de tan manoseado, ya no podría parecernos algo nuevo o sorprendente, en eso si se sacaron un 10, tiene varios elementos que son una copia fiel del ánime y otros que se salen de la línea pero no por ello se ven feos. El problema principal es que la película es tediosa, plana y si ningún conflicto emocionante que te haga que siquiera te importen los personajes, solo Johansson parece que fue a actuar y no como todos los demás que se ve que les pagaron para que nada más se pusieran ahí. El director es otro de los errores, es la segunda cinta de un director que lo único bueno que ha hecho en su carrera es un videoclip para “How To Destroy Angels”, y por último está el guión, al que sin problemas le daría todos los razzies posibles, con una estructura super caótica y que exige atención del espectador pero no ofrece nada para mantenerla
2. Bowie: The Man Who Changed The World (2016)
Dir. Sonia Anderson.
Resulta ser el primer documental póstumo sobre el gran David Bowie, no existe ninguna otra razón de peso para generarse expectativas respecto a esta cinta, la cual hace un recuento de la vida de esta figura, y de la gran estrella que logró ser, así como lo que había detrás de su misteriosa personalidad, y las personalidades que adoptó tras cada álbum que lanzaba.
El resultado final es una basura de verdadera pena ajena, ni “Historias Engarzadas” hace tan mal trabajo periodístico como el que resulta este bodrio, una película aburridísima, sin mayores datos de los que te puedes encontrar en wikipedia, con imágenes de archivo super genéricas y que incluso se llegan a repetir en algunas ocasiones. Es toda una oda a la mediocridad que no vale la pena revisar ni siquiera por curiosidad, vamos, tampoco pudieron conseguir los derechos para poner canciones y hacer mínimo un soundtrack memorable, la música de la cinta es un fusil tras otro de canciones de Bowie medio disfrazaditas para que no suenen a plagio pero para que digas “ah claro! es la de…”.
1. Amores Caníbales (The Bad Batch, 2016)
Dir. Ana Lily Amirpour
Ana Lily Amirpour tomó por sorpresa a todos con su ópera prima “A Girl Walks Home Alone At Night” una cinta de vampiros en blanco y negro en la que apostó mucho a la estética visual y que con su historia romántica pudo ser del agrado de muchas personas, incluyéndome. Para su segunda cinta, la primera que haría en EUA, las expectativas fueron muy altas, esta vez la historia se centraría en un futuro distópico en el que otra historia de amor peculiar se desarrollaría, esta vez entre una chica tratando de sobrevivir a las diferentes tribus con las que se encuentra y un sujeto que pertenece a una tribu de caníbales.
Al principio la estética me había atrapado por completo, inspirada bastante en cintas como Mad Max en las que en el futuro el planeta es un desierto que trata de probar la superviviencia del más fuerte, todo es árido y sucio, lleno de rednecks violentos. Sin embargo conforme la cinta avanzaba, no veía que así lo hiciera el desarrollo de sus personajes, bastante planos y con muchos otros secundarios que no aportan absolutamente nada a la trama, el ritmo es bastante flojo y está plagada de escenas en las que el lucimiento es meramente estético, sin ningún aporte a la trama, si hubiera algo que rescatarle sería el carisma que tiene Jason Momoa en pantalla, incluso se le nota un cierto rango actoral más allá de la cara de malvado dispuesto a sodomizarte que siempre pone. Una lástima que tan prometedora directora haya caído tan rápido en las garras de la masturbación visual que resulta para un autor el ser completamente presa de su estilo, ojalá esta chica tenga mucha mejor suerte para la próxima.