Dentro de todas las nominadas de este año, Roma en particular fue la que, desde su gestación, ya tenía un Oscar seguro: el de mejor película extranjera, lo demás, vendría dándose poco a poco, hasta convertirse en una de las más nominadas de esta entrega. Y no solo en los Oscar ha tenido éxito, la más reciente película de Cuarón ha tenido logros tan destacables en otras entregas de premios como el de no solo haber ganado la categoría obvia de película extranjera, sino que también ha logrado ganar el de mejor película.
Esta es otra de las películas que ha hecho tanta campaña para figurar, que se ha logrado colar en premiaciones impensables, la verdad es que no resulta molesto o injusto, la película se merece el éxito que está teniendo, Cuarón hace un trabajo maravilloso al dirigir de forma épica una historia muy íntima, dotarla de personalidad y darnos uno de sus mejores filmes. Tal vez el guion no es de lo mejor (de todas las películas de Cuarón es este elemento el menos logrado, con sus pocas excepciones) y a trama tienda a ser polémica, no deja de ser un retrato íntimo de la sociedad mexicana acomodada, pero desde el punto de vista de alguien que no pertenece a esta, lo que hizo que muchos acusaran a la película de romantizar el trabajo del hogar, afortunadamente ese asunto ha quedado en el pasado, porque la película narra justo lo que pretende contar, Cuarón no tiene intenciones de hablar de las clases bajas no porque no le importen, sino porque le son ajenas, y ahí sí sería injusto que él las representara desde una subjetividad manipuladora.
La película nos narra la cotidiana lucha de dos mujeres en México de los 70’s, una de ellas, trabajadora del hogar, que tiene una relación muy paradójica con la familia para la que trabaja, ya que en ocasiones no es más que una sombra, una persona cuyo quehacer debe de pasar casi desapercibido y que a su vez es considerada por los niños de la casa como un miembro importante, alguien a quien pueden considerar como una madre, y por quien ella puede ser capaz de arriesgar la vida, principalmente porque de ello depende su trabajo, un vínculo con el que Cuarón creció y es por lo que nace la película, este personaje es interpretado por Yalitza Aparicio de forma muy natural y por lo que muchos se fueron con la finta de que ella en realidad no estaba actuando y solo se interpretara a sí misma, pero que poco a poco ha demostrado que para nada es así y que la nominación al Oscar es muy merecida. El otro personaje femenino principal es el de la madre de esta familia de clase alta, una mujer que tiene que mantenerse como si nada malo estuviera pasando en su casa a pesar de que sabe que el padre de sus hijos ya no vivirá con ellos, pero que sin embargo tampoco le es tan difícil porque el padre en realidad siempre ha sido una persona ausente, alguien que se sigue viendo como un proveedor más que como un elemento afectivo importante para su familia, Marina de Tavira encarna muy bien a este personaje, fue muy grato el saber que también está nominada al Oscar, pero resulta injusto que en muy pocas entregas de premios la hayan nominado.
Pasando a los aspectos técnicos nominados, tenemos la mezcla y edición de sonido, los cuales están muy bien utilizados, lo que vuelve justificable que Cuarón haya peleado por estrenar la película en cines, ya que el solo estreno en Netflix no le haría justicia a estos efectos de profundidad que te transportan a los escenarios en los que se desarrolla la trama, aunque creo que el director pecó de ingenuo al creer que, siendo la apuesta fuerte de Netflix para obtener premios, la plataforma habría aceptado las políticas de estrenos exclusivos de los cines comerciales. Escenas como la del halconazo y la de Cleo entrando al mar vuelven al sonido un personaje más, cada detalle tomado en cuenta para volver aún más admirable lo que estamos viendo.
La fotografía y el diseño de producción son los otros dos rubros nominados que son muy valiosos en la película, es la primera vez que Cuarón trabaja como director de fotografía, demostrando lo mucho que le ha aprendido a Lubezki en especial al filmar los planos secuencia, algo que me causó algo de conflicto es el uso de la luz que, al ser una película en blanco y negro, a veces no se nos muestran muchas cosas y se queda con espacios oscuros en donde no debería de haberlos. El diseño de producción es sublime, nos transporta totalmente a la ciudad en aquellos años, los edificios, las calles, las pintas en las bardas, los techos de las casas, todo está ahí como si nunca se hubiera ido, incluso el caos logra mostrarse estético, como pasa con las escenas en donde hay puestos en las banquetas y la del incendio.
Roma no tiene sus nominaciones de gratis, pero debemos reconocer que viene a estrenarse en un tiempo en el que las películas latinoamericanas están siendo vistas por los países extranjeros como un documento más de la cultura en la que vivimos, de ahí su apreciación que en México se convirtió en un constante “no es para tanto”. Cuarón tuvo a bien estrenarla después de Gravity, ya que, sin aquella, su nombre no tendría el peso que hoy tiene como para llevarse a casa el Oscar a mejor director, y con la mejor de las suertes, el de mejor película.
TAMBIÉN HUBIERAN NOMINADO A…
Cold War (2018)
Dir. Pawel Pawlikowski
En esta edición de los Oscar ha habido tanta apertura a las películas extranjeras, que tenemos en casi cada categoría a alguna representante de habla no inglesa, si bien es muy rara la vez que nominan a una película extranjera en la categoría principal, el hecho de tener a dos directores de estas películas nominados, hace pensar que pudieron haber entrado las dos en la categoría principal, de cualquier manera, después de Roma, es Cold War la película extranjera con mayor reconocimiento del año.
Además de su nominación como director y película extranjera, también tiene una muy merecida mención en la categoría de mejor fotografía, en la cual Pawlikowsky vuelve a recurrir al blanco y negro, muy bien hecha, aprovechando el ritmo pausado de la película, con una composición de imagen exquisita. Resulta extraño el ratio que eligió pero está muy bien aprovechado. Sin duda es una competidora fuerte contra Roma, pero el poco reconocimiento que ha obtenido nos deja en claro que no ganará nada.
Esta historia de amor está muy bien contada, ubicada en tiempos bélicos en los que la pareja protagonista tiene que separarse, volver a verse pero seguir con sus vidas en lo individual, aunque después la separación vuelva a ser dolorosa. Otro aspecto muy destacado es el de la música, tiene un soundtrack exquisito que se disfruta bastante por su propia cuenta. Las actuaciones también son extraordinarias, Joanna Kulig es una actriz que transmite de forma brillante muchos de los sentimientos de su personaje.